西语童话:Chácharasdeni?os(06)
Y la chiquilla irguió la cabeza, como si fuera una princesa y debiera ir con la cabeza muy alta. En la calle, delante de la puerta entornada, un pobre ni?o miraba por la abertura. El peque?o no tenía acceso en la casa, pues carecía de la categoría necesaria. Había estado ayudando a la cocinera a dar vueltas al asador, y en premio le permitían ahora mirar desde detrás de la puerta a todos aquellos se?oritos acicalados que se divertían en la habitación. Para él era recompensa bastante y sobrada. 相关资料 |